Veo veo... un gigante gaseoso cuyo nombre empieza por S... y que se le conoce por estar rodeado de anillos. Hoy, hablamos de Saturno.

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Intro

(Música de cabecera de informativo)

-Muy buenas. Consternación en el sistema solar. La asociación de planetas con anillos que NO son Saturno, compuesta por Júpiter, Urano y Neptuno, solicitan ser pintados con anillos también. El próximo mes llevarán a cabo una gala benéfica para anillos afectados que contará con una estrella invitada, el cometa Halley, el cual vuelve a aparecer después de 76 años en el retiro. Contactamos con Karakatuchi para conocer la previsión del tiempo para el evento.

+Tiempo es lo que hace que yo me tendría que haber ido de aquí. Vamos ya con la intro, de verdad.

Cabecera

Desde que el ser humano tiene memoria, siempre ha mirado al cielo. Estrellas, planetas, constelaciones y demás movidas del inmenso, insondable, oscuro, aterrador, insultantemente largo a lo ancho y ancho a lo largo, caótico por naturaleza y nada acogedor espacio. Pero… ¿conoces el origen de sus historias? Empieza Astro.

Mitología

Hoy hablamos de Saturno, el planeta y señor de los anillos. A pesar de su considerable distancia tanto del Sol como de la Tierra, fue el último planeta identificado por las antiguas civilizaciones. De hecho, su nombre proviene de los romanos que se referían a él como "la estrella de Saturno", identificando a Saturno no solo como el padre de Júpiter, el supremo dios, sino también como la deidad que dio origen a las festividades navideñas. Vamos a desgranar esta información.

Saturno es retratado en la mitología como un venerable anciano de barba blanca, larga y espesa, compartiendo similitudes con su equivalente griego, Cronos, ambos conocidos por su extraña costumbre de devorar a sus propios hijos. Saturno, el hermano menor de Titán, estaba marcado por una ambición que le llevó a contraer un pacto peculiar: Titán le ofreció el trono de la Tierra a condición de que Saturno no tuviera descendencia masculina, esperando que el linaje de Titán recuperara el poder tras la muerte de Saturno. No obstante, Saturno, casado con Ops, desafió este acuerdo al tener varios hijos. Ante el nacimiento de sus hijos varones, se encontró en un dilema que "resolvió" con una solución macabra: devorar a sus propios hijos para eliminar cualquier amenaza a su reinado. No obstante, Júpiter fue salvado gracias a la astucia de su madre, y eventualmente derrocó a Saturno, liberando así a sus hermanos. Esta historia, profundamente arraigada en el mito, muestra notables paralelismos con la narrativa griega sobre Cronos, pero aún hay más capas en esta fascinante mitología.

Las tradiciones que rodean a Saturno se extienden hasta épocas anteriores a la fundación de Roma, siendo honrado con una festividad exclusiva que se llevaba a cabo desde el 17 hasta el 25 de diciembre. Durante este período de celebración, se producía un notable cambio en la estructura social: el poder que los amos ejercían sobre sus esclavos quedaba temporalmente suspendido, permitiéndoles a estos últimos disfrutar de una libertad de expresión y acción sin precedentes. La atmósfera se impregnaba de un espíritu festivo único, caracterizado por el cierre de tribunales y escuelas, la prohibición de conflictos armados y ejecuciones, y la limitación de las actividades laborales al ámbito culinario. La tradición también incluía el intercambio de regalos y la realización de banquetes opulentos. Ahora ya sabéis que la Navidad, de invento cristiano, tiene más bien poco.

Los romanos no eran la única cultura que sabía de la existencia de Saturno. Los griegos llamaban al planeta Fenon y consideraban al planeta la estrella asociada a Cronos. Una vez más, griegos y romanos presentándose el güorbú un rato antes de la clase de inglés porque no han hecho los deberes a tiempo y tienen que copiarse.

En la astrología y mitología hindú, Saturno es venerado como Sani, un nombre que no solo se asocia con el número siete y el sábado sino que también designa a una importante deidad masculina. Sani se representa frecuentemente como un distinguido hombre de tez oscura, portando una espada u otro tipo de arma, y montando un búfalo, cuervo, o buitre. Esta figura es emblemática dentro de la cultura hindú, simbolizando el dios del karma y la retribución justa. Sani es la encarnación de la justicia cósmica, encargado de dispensar recompensas o castigos basados en los actos, pensamientos y acciones de los individuos.

Ciencia

Pero bueno, suficiente de mitología. Hablemos de Saturno como planeta.

Saturno es el sexto planeta en distancia al sol del sistema solar, y el segundo en tamaño. Con un radio de más de 58mil kilómetros, podrías poner 9 planetas Tierra en fila, y aún así te sobraría espacio. También es el otro gigante gaseoso de nuestro vecindario cósmico, aunque al igual que sucede con Júpiter, los científicos creen que podría albergar un núcleo sólido en su interior. Sin embargo, a diferencia de Júpiter, Saturno es bastante poco denso, hasta el punto de que flotaría sobre el agua. El peso de Saturno, de unas 95 veces el de la Tierra, no se corresponde con su gran tamaño.

No es de extrañar entonces que Saturno sea una inmensa esfera conformada en su gran mayoría por hidrógeno y helio. Osea, todo gases. Un aerored destruiría la carrera de este planeta. Los científicos creen que en su interior podría esconderse un núcleo sólido de metales como hierro y níquel. Este núcleo estaría rodeado de material rocoso y otros compuestos solidificados por la intensa presión y el calor, aunque por el momento se trata únicamente de una hipótesis. Del mismo modo que en el caso de Júpiter, este núcleo de Saturno estaría rodeado por una capa de hidrógeno metálico líquido debido a la gran gravedad del planeta y la presión ejercida por su atmósfera.

Las similitudes de Saturno con Júpiter se extienden más allá de sus dimensiones y composición; ambos planetas comparten características atmosféricas notables. La atmósfera de Saturno se caracteriza por un esquema de colores que varía desde el amarillo y el beige hasta el marrón y el gris. Estas bandas son manifestaciones visuales de las nubes, corrientes en chorro y tormentas dinámicas que cubren el planeta, las cuales experimentan cambios constantes impulsados por los intensos vientos que azotan su superficie. Dichos vientos pueden superar los 1500 kilómetros por hora, una velocidad que destaca su poder destructivo en comparación con los estándares terrestres, donde vientos de apenas 150 km/h ya requieren medidas de emergencia para proteger a la población, como el traslado a refugios antihuracanes. Vamos que allí una sombrilla mal puesta en la arena sería increíblemente mortal.

Una de las características más peculiares de la atmósfera del planeta es el gran hexágono que puede observarse en el hemisferio norte de Saturno. Este hexágono cambia de color con el paso de las estaciones, gira en sentido antihorario, y se observó por primera vez hace unos veinte años gracias a la sonda Cassini-(Joiguens) Huygens. Se cree que este peculiar efecto se produce debido a la conjunción de una gran tormenta giratoria en el centro de su polo norte y una corriente en chorro ondulada con vientos que pueden alcanzar los 320 kilómetros por hora: un fenómeno verdaderamente único en todo el sistema solar.

Anillos y satélites

Pero si hay algo por lo que es conocido Saturno es por sus 7 anillos, que se extienden hasta una distancia de 120mil kilómetros del planeta por encima de la… bueno, lo que el planeta tenga por superficie. En su punto más ancho, estos anillos pueden llegar a tener hasta 10 kilómetros de grosor. Curiosamente, los anillos están denominados con letras de acuerdo a su luminosidad, empezando por el anillo A, el más brillante, hasta llegar al anillo G. La secuencia de los anillos, desde la proximidad más cercana a Saturno hacia el exterior, es D, C, B, A, F, G, y E. Si compras vocal, resuelves panel en la ruleta.

No siempre se ha conocido la existencia de estos famosos anillos. En sus primeras observaciones al planeta, el astrónomo e inventor Galileo Galilei quedó completamente sorprendido por los anillos. Tanto, que en primera instancia pensó que eran dos cuerpos los que orbitaban al gigante gaseoso. Más atónito se quedó cuando, al observar meses más tarde, no encontró rastro de los anillos. Resulta que estaban de perfil y no se apreciaban con su rudimentario telescopio. Habría que esperar hasta 1659 para dar con la explicación anular, cuando Christian (Joiguens) Huygens observó el planeta con un telescopio más potente.

Aunque los anillos de Saturno son uno de los sistemas más icónicos y estudiados del sistema solar, aún hoy día guardan misterios que desafían nuestra comprensión completa. Inicialmente, las investigaciones revelaron que estos anillos están formados por millones de fragmentos de hielo y roca, restos de cometas, asteroides o lunas desintegradas por la intensa gravedad de Saturno. Sin embargo, observaciones más recientes han identificado estructuras fascinantes dentro de los anillos, conocidas como "cuñas" o regiones oscurecidas, que parecen influenciadas por la dinámica de la potente magnetosfera del planeta. Sí, la misma magnetosfera que provoca la aparición de auroras boreales en los polos. Si ya sabía yo que hacer un episodio sobre las auroras boreales tenía que servir para algo.

Los últimos estudios apuntan que los anillos se formaron entre hace 10 y 100 millones de años, cuando los dinosaurios aún habitaban la Tierra. De hecho, los científicos también creen que los anillos de los Saturno podrían desaparecer en el transcurso de los próximos 300 millones de años atraídos por la gravedad del gigante gaseoso.

Sin embargo, estos anillos no son lo único que orbita alrededor del planeta. Saturno cuenta con 53 lunas confirmadas y otras 30 pendientes de confirmación oficial. La mayor de sus lunas, Titán, fue descubierta en 1655 por Christiaan Huygens (joiguens). Las siguientes lunas, Tetis, Dione, Rea y Jápeto, fueron descubiertas entre 1671 y 1684 por Giovanni Domenico Cassini. Y así podríamos continuar hasta 1966, año en el que se descubrió el último satélite con un tamaño superior a los 100 kilómetros, Epimeteo.

La mayoría de las lunas de Saturno son más pequeñas que la nuestra. Titán, la más grande, destaca con un diámetro superior a los 5,000 kilómetros, eclipsando los 3,474 km de nuestra Luna, y representa casi el 96% de la masa total de todos los satélites de Saturno. Rea y Jápeto son de tamaño similar entre sí, pero considerablemente más pequeños que Titán. El resto de las lunas son definitivamente más pequeñas, y estas conforman lo que se conoce como el grupo de los satélites clásicos externos.

El sistema de lunas de Saturno es, en sí mismo, un espectáculo fascinante. Algunos satélites, conocidos como lunas pastoras, juegan un papel crucial en la conformación y mantenimiento de los anillos del planeta, de manera similar a como los perros pastores controlan y guían a un rebaño de ovejas. Encélado, otra luna, es uno de los objetos más brillantes del sistema solar, gracias a su superficie cubierta de hielo que actúa como un espejo perfecto. Jápeto, por su parte, presenta un contraste dramático en su superficie que recuerda a un helado de chocolate y vainilla, con una mitad de color marrón oscuro y la otra mitad de un tono más claro. Y Titán, la mayor de las lunas, está envuelta en nubes de un intenso color rojizo, lo que ha impedido hasta ahora la obtención de imágenes claras de su superficie. Se cree que esta enigmática luna alberga lagos, no de agua, sino de compuestos como el metano y el etano, sugiriendo un escenario único y ajeno a la experiencia terrestre.

Cierre

Hablaríamos también de los satélites irregulares de Saturno, pero es que echaríamos horas leyendo una lista de la compra. Que si el grupo Inuit, que si los dioses nórdicos del grupo nórdico. Así que, en lugar de eso, vamos a hablar del final de este episodio.

Muchas gracias a todos los que nos escucháis y esperáis que saquemos los nuevos episodios, aunque nuestro calendario tenga más cambios que el hexágono ese de Venus. Un saludo a Héctor Rodríguez, periodista para National Geographic, cuyo trabajo ha sido fuente inestimable para el guión de este episodio. Es que estamos tratando de citar las fuentes ahora, que con todo esto de chat gpt…

Nos vemos en el siguiente episodio con más historietas del espacio.

¡Astro luego!